100k “Conociendo a la Pachamama”

{jcomments on}Los días 8,9 y 10 de Octubre participe de la 4ta edición de los 100k "Conociendo a la Pachamama" en Tilcara, Jujuy. Carrera de ultra resistencia y autosuficiencia de aventura. la carrera presentaba una gran dificultad a superar,  correr por arriba de los 4000 msnm, y debía descubrir como respondería mi físico a tremenda exigencia, gracias a la Asociación Española S.M por brindarme la ayuda cubriéndome la Inscripción y estadía, los Pasajes aéreos brindados por Comodoro Deportes, pude estar 2 días antes de la competencia para poder aclimatar por lo menos un par de días, me recibió el pintoresco pueblo indígena de Tilcara con la amabilidad de su gente, sin miedo a lo que iba a encontrar en carrera pero si respetando lo duro que sabía que encontraría y no me equivoque, hoy puedo decir que sin duda fue una de las carreras más duras y exigentes que he corrido. el día previo a la competencia decidí salir a trotar y ver cómo me sentía ... fui a la garganta del Diablo, un paisaje imponente, hermoso, pero en mi cabeza solo tenía la decisión de dejar todo por completar un sueño mas, los 100k en la temida Puna, lo que hizo que me anime a este desafío fue el comentario entre corredores de ultra que decían que era una carrera solo para atletas de la zona, y yo quería probarme a mi mismo, que yendo desde la Patagonia también me sentía preparado para superarlo y lograrlo dejando todo.  previo chequeo de equipo obligatorio, la charla previa, entrega del mapa y la hoja de ruta donde nos decían los Puestos de control que debíamos encontrar y alcanzar, muchos de ellos en cumbre de altas montaña, solo quedaba preparar el equipo, la comida, botiquín básico de primeros auxilios...y ya estaba listo para dormir la noche previa esperando el dia sábado, la largada seria a las 11hs de la mañana, lentamente y con la ansiedad lógica fuimos caminando a la plaza principal de Tilcara, lugar donde se encontraba el punto de largada, solo quedaba encomendar la vida a Dios, la protección de los afectos y la fortaleza de todos lo que siempre están conmigo en esos momentos, mi banderita de chenque , el club de rugby de mi vida, firme en la mochila, porque ella representa a mis hermanos del club que me formo como persona y como deportista.. ya estábamos los casi 160 "locos" listos, no a desafiar la Puna sino a conocer a la Pachamama, que se había echo sentir los días previos con un fuerte temblor que nos hizo sentir lo frágiles que somos... y llego el conteo previo con la euforia de la largada, el trote salió lento y firme tras el auto de la organización que nos acompañaría hasta la salida del pueblo...allí se inicio una fuerte subida hacia las cuevas del waira,que ya nos hacía notar lo exigente de lo que vendría, la agitada respiración y el corazón parecía dispararse, las articulaciones se iban acomodando, en los pensamientos solo estaba la decisión de seguir firme y fuerte, al llegar a las cuevas debimos ingresar a ella arrastrándonos para poder pasar hasta el otro extremo donde se veía la luz de la salida, nos encontramos con un fuerte descenso...ya muchos de los corredores que habían salido fuerte se iban quedando, yo me sentía firme... me encontré ubicado en el 2do pelotón a poca distancia de los punteros, llegamos al 1er PC, nos controlaron equipo porque todos los corredores deben llevar todo lo obligatorio, de faltar algo se corría el riesgo de ser sacado de competencia, y comenzamos el duro ascenso por la Cuesta de Punta corral, donde pasamos de los 2400 msnm a los 3890 en una dura trepada, mi experiencia en montaña me hacia acordar el duro ascenso de Aconcagua, de mis amigos de expedición y muy lentamente y firme fui subiendo durante casi 3hs...iba encontrándome con corredores de gran experiencia y reconocidos, en malas condiciones por la falta de oxigeno, deshidratación y recién llevábamos unos 15 a 20 kms. les preguntaba si necesitaban algo, les avisaba a los patrulleros rescatistas....esa cuesta fue decisiva para muchos corredores de Elite, que decidían abandonar.. me encontré solo en la cumbre, atento a la hoja de ruta fui encontrando los PC y marcándolos en mi pasaporte para demostrar mi paso por ellos, asi llegue al antiguo pueblo abandonado y su capilla del Abra de Punta Corral, de alli quedaban un descenso por senderos perdidos entre los cactus, un interminable sendero que nos llevaría nuevamente a Tilcara, donde debíamos ir a la plaza a marcar el pasaporte, cuando comencé mi descenso hacia el pueblo ya era las 19hs mas o menos, un nuevo PC y el descenso final al pueblo en total oscuridad, sabia dentro mío que aun faltaba mucho y seria durísimo, había que bajar hasta la plaza y volver a subir para recorrer 14 Km y volver a descender hasta alcanzar la orilla del rio Grande que nos devolvería nuevamente a Tilcara, mi organismo no aceptaba alimentos ni agua, cada vez que ingería algo lo devolvía inmediatamente, por un momento pensé que ahora vendría la verdadera carrera, ver hasta dónde podría llegar, si por fin encontraría mi limite..cada paso costaba muchísimo, el sufrimiento era durísimo, solo luchaba por no descontrolarme y seguir sintiéndome mentalmente fuerte, me hizo pensar en todos los que habían echo posible que yo estuviese allí, no podía entregarme sin pelear, estaba decidido a dejar todo sin evaluar el costo y sucedió lo que todo corredor de ultra resistencia vivencio en algún momento, descubrirse que no hay nada que pueda hacernos detener, solo hay una manera de salir de ahí y yo sé dentro mío que eso nunca sucederá, las carreras no se abandonan me decía una y otra vez ..en eso sonó mi celular que debíamos llevar obligatoriamente junto a la radio por cualquier emergencia...en un mensaje de Ale, mi novia...alentándome, dándome fuerzas, me decía que le haga un HAKA a la Pacha mama, me alegro el alma y sin siquiera darme cuenta me encontré nuevamente en carrera...la organización, debido a pronostico de temporal en la montaña decidió cortar la carrera y largar nuevamente a las 6 de la mañana del domingo, yo me encontré llegando al corte en 5ta posición en la clasificación general y 2do en mi categoría, no lo podía creer, el esfuerzo se veía reflejado en el resultado, llegue a las 23hs exactas, lo que me dio tiempo a descansar, alimentarme, rehidratarme porque la descompostura por la exigencia me había provocado un gran desgaste...tenía que estar fuerte para volver a largar a las 6am, el grueso de los corredores llegaron sobre la hora, muchos decidieron no salir ... de los 160 corredores solo éramos 26 los que quedábamos en competencia, lo que hablaba de lo duro y exigente, la Pachamama nos estaba pidiendo todo lo que teníamos y yo estaba decidido a dejarlo todo... la salida no podía ser de otra manera que en subida!! Ya estábamos nuevamente en carrera, 1,30hs de trepada, me sentía fuerte y estaba en el pelotón de punteros, éramos 8... todos ellos candidatos a ganar la competencia, entre ellos 2 locales que conocían las montañas a la perfección, y yo...cuando me preguntaban de donde era y les decía, de Comodoro, Patagonia no lo podían creer y sí, yo estaba ahí con ellos...nos quedaban menos de 30 Km y ya sentía que nada haría que no complete la carrera, durante varias horas nos encontrábamos solos, si bien íbamos casi juntos por momentos nos separábamos yendo por senderos distintos pero llegando a los PC casi juntos, no nos hablábamos mucho, si uno necesitaba agua le dábamos o le preguntábamos como iban, seria estratégico para demostrarles a los demás que estas fuerte o saber en qué condiciones venían ellos... así tras largas horas pude llegar a la meta junto  a Sergio, un corredor Cordobés con quien compartimos gran parte de los últimos kms, feliz, había logrado completar una de las carreras que me exigió todo, una de las más duras para correr y lo estaba haciendo en buena posición de clasificación y